guion

Un día en la vida - Danais

Temporada 1 /

Episodio 3

publicado el 28.05.2024

Danais Cino Díaz: DC

Presentador: P

Narradora: N

INICIO

Radio Reloj: «Seis treinta minutos. Dicen la fecha, 10 de julio de 2021, y hablan de la transmisión y pasan a titulares…»

P

hola. bienvenidos a ‘La mala palabra’, un podcast de El Estornudo.

yo soy Enrique Guzmán Karell, y este es un espacio donde contamos historias reales, eventos que han sucedido a personas como tú.

esta es nuestra primera temporada, se llama ‘Un día en la vida’, y tiene cinco episodios. en cada uno hacemos una narración en torno a un suceso que cambió la vida de su protagonista, que determinó un antes y un después.

el tercer episodio se titula Danais.

todo ocurre en La Habana, Cuba, en julio de 2021.

DC

yo recuerdo que era un día caluroso, pleno verano…

P

ella es Danais; una cubana de 36 años, madre soltera, con un hijo de ocho y una hija de cuatro.

en este episodio se narran acciones violentas, por lo que no es apropiado para menores.

P

hoy contamos con la narración de la actriz Lola Amores. y ella cuenta así:

PARTE 1
N

el 10 de julio de 2021 Danais se despertó sobre las seis y media de la mañana, como todos los días.

era sábado.

DC

me levanté tempranito, los niños se levantan temprano, a las seis y pico o siete de la mañana están despiertos…

N

en la cama organizó mentalmente las tareas del día. tenía que adelantar lo suficiente antes de que los niños comenzaran a jugar y a querer salir a la calle. pero sobre todo, antes de que volvieran a quitar la electricidad, pues en las últimas semanas los apagones eran una constante.

DC

un sábado de salir a resolver cosas en el agro, intentar acercarte a alguna tienda a ver si logras un turno o logras que la cola no sea tan larga…

N

Danais debía preparar desayuno, recoger el reguero que dejaron sus hijos la noche anterior, lavar e ir a comprar comida. más tarde, si aparecía alguna clienta…

DC

…hacía queratinas aquí en la casa, arreglaba pelos, teñía, peinaba… a clientes…

N

Danais vive en un pequeño apartamento de interiores que antes fue de sus abuelos y luego de su madre.

DC

seis metros de largo por cuatro de ancho, y es abajo y arriba; es un apartamento de dos pisos.


he vivido toda mi vida en el barrio de Lawton, del municipio 10 de Octubre.

N

el municipio más poblado de La Habana…

DC

es un pasillo de pocas viviendas. era una casa de techo de madera. yo construí cuando me casé y tuve a mis hijos. construí al lado de casa de mi mamá.

 

una familia muy humilde. padres divorciados. mi mamá sola, con dos… crio dos hijos. trabajadora, trabajó 38 años de su vida en la misma empresa, que es la misma empresa donde actualmente trabajo yo.

N

Danais se graduó de optometría y trabajó en el sistema de salud cubano más de una década. como su salario nunca superó el equivalente a 25 dólares al mes, dejó su profesión y comenzó como compradora en la Unión Eléctrica, donde le pagaban un poco mejor. durante la pandemia no iba al trabajo porque tenía que cuidar a los niños. recibía el 60 % del salario, que eran unos 1 800 pesos cubanos, o 28 dólares al cambio en el mercado informal.

DC

yo crecí viendo a mi mamá sacrificarse y trabajar muchísimo para darnos de comer a mí, a mi hermano y a mi abuela, que ya era enferma y siempre fue responsabilidad de mi mamá también.

N

Danais cree que las noticias del día anterior la obligarán a ser más estricta con la salida de los niños a la calle, que ya llevan un año de encierro, casi siempre jugando en su pequeño apartamento y el estrecho pasillo que da acceso a la calle Altarriba.

«Cuba amanece con el peor y más complicado escenario epidemiológico desde marzo del 2020, tras confirmar las cifras más altas de contagios por Covid-19 para una jornada, así como de fallecidos…»

N

para muchos cubanos esas informaciones no solo generaron preocupación sino molestia, pues a pesar de las privaciones y esfuerzos del último año la situación del país cada día era peor.

N

todavía en la cama, Danais recordó el Parte Informativo del doctor Francisco Durán, director nacional de epidemiología, un hombre de voz cálida y pausada a quien la noche anterior se le notó abatido.

«creo que no tengo que decir; el pueblo de Cuba que sigue la información, y de otros lugares, se dará cuenta de que es la cifra más elevada que hemos tenido en toda la historia de la pandemia.»

N

en el Noticiero también dijeron que todos los territorios del país presentaban una alta transmisión comunitaria del virus, con cifra récord en edades pediátricas.

«el presidente cubano Miguel Díaz Canel visita nuevamente la provincia de Matanzas, epicentro de la pandemia de Covid-19 en el país.»

N

para Danais, sin embargo, lo más inquietante era lo que omitían las noticias oficiales: había desabastecimiento crónico de productos esenciales, hospitales colapsados, carencia de medicinas, de insumos básicos e, incluso, de oxígeno.

DC

en esta parte de 10 de Octubre hubo una crisis tremenda con el agua. en plena Covid. no había agua. yo me acuerdo que en ese tiempo tenía que pagar pipas. no había agua… no había agua…

N

apenas seis meses atrás, el primero de enero de ese año, el gobierno había establecido un ajuste económico que pretendía eliminar la dualidad monetaria que existía en Cuba desde principios de los noventa. implementaron la nombrada «Tarea Ordenamiento», un grupo de medidas que en la práctica aumentaron los precios de los escasos productos que se podían conseguir.

«ahora cambiaron la moneda en medio de una pandemia
libertad de expresión, que hablar es una tragedia
apretaron el zapato, botaron la media
y entre la cola y el COVID la cosa se puso seria…»

DC

estos cambios, bajo el gobierno de Díaz-Canel, la Coyuntura, el Reordenamiento, han venido, desgraciadamente, a la par de la pandemia y creo que han sido los que más me han hecho abrir los ojos. ya yo los venía abriendo hacía varios años. nada beneficia al pueblo, nada beneficia a los más pobres. nada nos beneficia a los de abajo. todo es más difícil. yo he descubierto en mí sentimientos que nunca pensé que yo tuviera.

N

Danais bajó las escaleras de la única habitación de su casa. ya en la cocina, cortó dos panes individuales, los lasqueó horizontalmente y obtuvo seis rodajas que puso a tostar en la sartén. calentó la leche. preparó jugo instantáneo de naranja y coló café. luego abrió la ventana y llamó a su madre. le ofreció café y le pidió que cuidara a los niños para ir a la tienda.

DC

mi mamá es de los rostros que miras en la calle, que miras a tu alrededor y te lo dicen todo. mi mamá no tiene ya esperanzas de nada, no tiene una ilusión. a cada instante te repite que ella se va a morir viviendo en este solar, y que se va a morir y no va a tener una casa como ella siempre la soñó.

N

un solar es una vivienda múltiple, compuesta por numerosos pequeños apartamentos, en la que con frecuencia hay un área común, un patio o pasillo central, con un baño compartido. por solar también se entiende un lugar precario, de escasas comodidades.

N

Danais salió a la misma calle de toda su vida. el cielo estaba despejado y no había brisa. hacía un calor insoportable…

DC

lo mejor es ni salir a la calle…

N

los vecinos saludaban a quien había sido una alegre niña poco tiempo atrás.

 

en ese barrio cursó la primaria, la secundaria y el preuniversitario. Danais fue una alumna aplicada, entusiasta, militante de la Juventud Comunista, cuando buena parte de la sociedad cubana confiaba en lo que el sistema prometía garantizar: educación pública y servicios de salud de calidad y mayores posibilidades económicas y sociales para todos los sectores.

DC

yo fui militante de la Juventud: el pre, la carrera y entregué el carné ahora en esta empresa en la que estoy. 10 años fui militante de la Juventud.

 

cuando me incorporé a la vida laboral y empecé a trabajar en aquel policlínico, tendría 19, 20 años, y pienso que ahí está la principal decepción de la mayoría de los jóvenes, que se incorporan a trabajar y ven que el fruto del trabajo no da ningún resultado, no tienes ningún beneficio. y te vas desencantando de ver que no logras nada, no resuelves tu vida.

 

vendas que se te van cayendo. con 20 años yo todavía me creía que donde único la escuela era gratis era aquí en Cuba y donde único la atención médica era gratis era aquí en Cuba.

N

durante los últimos años, y muy especialmente por esos meses, buena parte de las conversaciones entre familiares, amigos y vecinos, y los intercambios en redes sociales, hacían evidente la frustración de muchos cubanos.

DC

creo que aquí estamos condenados a ser pobres eternamente. hagas lo que hagas. estás condenada a vivir en la pobreza.

N

Danais tiene incorporado que por donde quiera que se desplaza en su barrio la constante es subir y bajar pendientes, o lomas, como les llaman los residentes de la geografía más elevada de La Habana. desde la esquina de su casa se ve buena parte de la ciudad, también el mar.

DC

cuando yo me paro en mi barrio y lo miro es diferente a cuando yo era una niña, al barrio que yo recuerdo. los edificios no se estaban cayendo. no estaban los aleros tumbados.

N

el vecindario había cambiado bastante desde los tiempos en que dio sus primeros pasos. se llenó de rejas por la inseguridad. cambiaron las estructuras y colores de las casas, ahora más ocres, como vencidas por el tiempo. cambiaron las aceras y calles, llenas de baches y huecos. cambiaron los aromas de un lugar que hoy huele a basura, a salideros de albañales y al azufre que llega del puerto y la refinería.

DC

lo único que se respira, es mucho descontento, mucho descontento, mucha desolación, tristeza. hay tristeza en la cara de las personas, solo están enfocados en ver cómo comen, cómo resuelven, cómo sobreviven. ya esto no da más, no da más… no hay una sola cosa que funcione bien…

N

pero sin dudas, lo que más cambió fueron los vecinos, la ropa de los vecinos, los rostros de los vecinos, el humor de los vecinos…

 

también ha cambiado Danais. en su trabajo la amonestaron por sus críticas al gobierno en redes sociales.

DC

había tenido el llamado de la gente del Partido, por las publicaciones de Facebook. y ya me habían advertido, «cariñosamente», que para que no me fuera a buscar un problema y no tuvieran que pasar mi nombre a la Seguridad del Estado, que dejara de poner en Facebook las cosas que yo ponía. yo respondí que el Facebook era mío particular, que no era corporativo, no era de la empresa, yo no lo abría en el trabajo. ni siquiera teníamos internet en el trabajo… pero bueno, me hicieron ese llamado…

N

Danais poco a poco fue conectándose con los nuevos movimientos de la sociedad civil que hacían reclamos públicos.

DC

creo que fue a raíz del derrumbe de la casa en La Habana Vieja.

N

se refiere al derrumbe de un balcón que provocó la muerte de tres niñas a inicios de 2020.

«Mueren tres niñas en La Habana al desplomarse un balcón…»

DC

y después fue San Isidro y ya conocí a Alcántara.

N

Alcántara es Luis Manuel Otero Alcántara, líder del Movimiento San Isidro, organización que agrupa a jóvenes artistas e intelectuales críticos de las políticas del estado hacia el sector cultural y otras de mayor alcance social.

«estamos conectados, los quiero…»

DC

luego vino el 27N y sí he seguido estas corrientes… que dan una esperanza o un aliento de que sí se puede hacer algo, de que puedes hacer cosas, sin hacer nada ilegal, sin hacer nada incorrecto, sin agredir a nadie. sí hay cosas que se pueden hacer y sí influyeron en mi pensamiento.

N

Danais no solo cree que la realidad que vive se puede cambiar, sino que vale la pena intentarlo.

DC

tú no puedes ver que hay personas haciendo, intentando, luchando por cambiar cosas que te afectan a ti también y que tú también las deseas así. y entonces tú dices «¿por qué yo me voy a quedar fuera sin hacer nada?»

N

Danais ya ha caminado más de un kilómetro. un trayecto que seguía la promesa de unas salchichas que no sabía si iba a alcanzar.

 

cuando llegó a la pequeña tienda la cola era inmensa. eran cientos de personas, casi todos adultos, muchas mujeres, la mayoría negras y mestizas. gente humilde con bolsas en las manos, portando mascarillas sin convicción.

N

Danais averiguó que un puesto en la cola costaba 100 pesos cubanos. cuatro veces más que el paquete de diez salchichas que tenía permitido comprar.

DC

toda la comida hay que comprarla en la calle, a precios de revendedores, porque yo no puedo hacer las colas. aquí en 10 de Octubre las tiendas son imposibles, porque hay una tienda en todo este tramo de acá, todos los solares están llenos de gente y las tiendas son imposibles. cuando puedo, lo adquiero con los revendedores, al precio de la calle.

N

no estaba dispuesta a hacer la cola ni a pagar un turno y dio vuelta atrás para ir al agromercado.

DC

luego salí al agro, al mercado ahí de cerca de mi casa, al agro de Colina.

N

regresó por una avenida que en el verano de 2021 estaba menos concurrida que de costumbre.

 

normalmente es una calle llena de puntos de venta informales. donde se ofrecen muchos productos que parece que no dan más. son habituales rellenadores de fosforeras, vendedores de escobas, de ropas, adornos, cazuelas y útiles de cocina de segunda mano.

DC

venden cosas viejas, usadas, zapatos rotos, cables de teléfono usados, que nadie sabe si sirven o no sirven… cosas de plomería…

N

Danais llegó al agromercado cansada de caminar y con sed. atravesó la sección de carnes y no había nada. aquel espacio solo mostraba básculas y estantes vacíos.

DC

había un desabastecimiento total, estaba buscando algún vegetal, alguna vianda…

N

siguió hasta los vendedores de vegetales y frutas. tampoco había casi nada. vio plátanos burros, habichuelas y unas cebollas que parecían dientes de ajo.

DC

los vegetales y las frutas que estaban imposibles, muy, muy caro y mala calidad. hace muchísimo tiempo yo no compro vegetales… ni frutas…

N

Danais se fue a su casa con las manos vacías. tenía otras cosas que hacer.

DC

regresé a la casa y estaban los niños queriendo salir a jugar a la calle.

N

su madre había adelantado la comida. hizo arroz blanco, pollo y puso a ablandar unos frijoles que Danais no sabe de dónde salieron, pero tampoco pregunta.

 

al final de la tarde, poco antes del Noticiero, se fue la luz…

DC

los vecinos empezaban a dar gritos, mi mamá incluida: que si los equipos eléctricos se iban a romper, que iban a desbaratar los refrigeradores. hay una vecina al lado que es gritona, y cada vez que quitaban la luz se ponía a decir malas palabras.

N

sin el alivio de los ventiladores, el calor era más severo…

DC

nosotros sacábamos a los niños pa’l pasillo cuando se iba la luz.

N

Danais salió con su madre y los niños. se les unieron otros vecinos. se quejaban… y unos minutos después se instaló la polémica.

DC

y estábamos conversando con una vecina mi mamá, mi hermano, yo y los niños. y yo le dije a mi mamá… «esto ya es insostenible, estos apagones, la cola… ya esto no hay quien lo aguante, la gente se van a tirar a las calles, van a salir a la calle.» y mi mamá me dijo: «no, no, mija, no, aquí no va a pasar nada.»

N

eran dos ideas que solo la realidad y el tiempo podrían confirmar. cuánto le corresponderá a la continuidad y cuánto al cambio.

DC

ya cuando se acercaba la hora de dormir, yo los subía pa’l cuarto, abría las ventanas del cuarto, y me ponía a echarles aire, a luchar, a batallar hasta que lograba que se quedaran dormidos por cansancio, a las doce de la noche, doce y pico, una de la mañana era que se lograban quedar dormidos.

N

era desesperante la coincidencia de mucho calor, apagón y mosquitos. Danais movía regularmente un cartón que cumplía las funciones de abanico. la luz llegó pasadas las doce. encendió el ventilador.

Radio Reloj:
«crece en Cuba interés por el empleo…»

N

a la mañana siguiente, domingo 11 de julio, se repitió la misma rutina del último año y medio. Danais preparó desayuno. el mismo desayuno. sus hijos bajaron a la pequeña sala del apartamento y se acostaron en el sofá para ver los dibujos animados.

N

unos minutos después Danais compartió café con su mamá…

DC

sobre las 10 de la mañana llega un amigo de mi hermano y le dice a mi hermano: «¿no has visto, en San Antonio de los Baños que están en las calles, que está todo el mundo en la calle?» y ya me conecto, y lo primero que empecé a ver fueron imágenes y escritos de San Antonio de los Baños, hasta que di con una directa de San Antonio de los Baños.

«libertad. libertad. ibertad…»
«no tenemos miedo. no tenemos miedo. no tenemos miedo…»,
«Patria y Vida. Patria y Vida. Patria y Vida…»,
«Díaz Canel, singao»

N

miles de pobladores se manifestaban frente a las sedes del partido comunista y de la asamblea del poder popular de San Antonio de los Baños, en la provincia de Artemisa, vecina de La Habana. protestaban porque estaban sin agua desde hacía varios días.

DC

llamé a mi mamá y llamé a mi hermano: «miren esto, como hay personas, y están en la calle y no hay policías». luego, a cada rato estaba pendiente y empezaron a salir escritos de que Santiago de Cuba había salido a las calles. luego leí que aquí en La Habana ya Regla había salido a la calle, que La Lisa estaba en la calle y así fue toda la mañana.

 

y vi así, todo el pueblo unido, era una cosa que se veía bien emocionante. y luego, a las doce, doce y pico, una de la tarde, vi una directa de Alcántara…

«to’el mundo, to’el mundo pa’ la calle. el MSI manda pa’ la calle ahora mismo. ‘toy puesto. está bueno ya. SOS Cuba. es pa’ la calle. yo me voy pa’ Malecón me cueste lo que me cueste. me cueste lo que me cueste ya es hasta atrás. estamos conectados. libertad pa’ los presos políticos. ya está bueno de dictadura ya. democracia es lo que nosotros queremos.»

DC

le dije a mi hermano: «Duniel, tenemos que ir pa’ La Habana, nos tenemos que ir pa’ la calle». una amiga de mi hermano que estaba aquí también y dijo: «sí, sí, yo también voy». de pronto, cuando nos dimos cuenta, ya estábamos vestidos. y fue que yo le dije a mi mamá: «¿mami, tú me cuidas a los niños?». mi mamá me dijo: «sí, sí, yo me quedo con ellos.»

N

fue una mañana especial para muchos cubanos. se mezclaron la emoción, la esperanza y la incertidumbre sobre lo que pasaría después.

DC

cuando salimos de aquí de la cuadra, un vecino estaba vestido en el portal y nos dijo: «¿pa’ dónde ustedes van?» y nosotros dijimos: «pa’ La Habana.». y nos dijo: «voy con ustedes.»

N

buena parte de las protestas ocurrieron en los lugares más pobres y carenciados. decenas de barrios, municipios y ciudades estaban protestando en las calles de manera espontánea. la policía intentaba detener a los manifestantes pero hasta ese momento no se observaba represión… no todavía…

DC

yo nunca había visto una manifestación así de ese tipo.

DC

hasta ese momento me consideraba una persona cobarde. yo no me consideraba valiente para nada. yo nunca he estado en problemas, le tengo pánico, terror a los problemas, a la bronca, a la violencia. pero en ese momento es como que me llenaba de valor. me sentía diferente. me sentía libre… no sé…

N

en la medida que avanzaban las horas y crecía la magnitud de las movilizaciones, los cuerpos de seguridad abandonaron su desconcierto inicial. empezaron a mostrarse más coordinados, endurecieron sus acciones y comenzaron a golpear y a detener a los manifestantes.

DC

hasta que en Galiano y San Rafael la multitud dobló por el bulevar de San Rafael y ahí sí fue donde se puso bien fea la cosa. como en la tercera esquina, ya había un camión de policías vestidos de civiles. y era como que estaban parados y esperando, y ahí sí… ya ahí empecé a ver cosas bien horribles: sangre, violencia, mucha, mucha, mucha violencia.

 

ya luego de eso mi mamá nos empezó a llamar por teléfono: «¿dónde ustedes están?, vengan pa’cá que Díaz Canel salió en el televisor:

«estamos convocando a todos los revolucionarios del país, a todos los comunistas, a que salgan a las calles en cualquiera de los lugares donde se van a producir estas provocaciones.

hoy, desde ahora, y en todos estos días. y enfrentarlas con decisión, con firmeza, con valentía.

y estamos dispuestos a todo…

la Orden de Combate está dada. a la calle los revolucionarios.»

DC

entonces mi mamá, llamando por teléfono: «vengan ya, vengan ya, por favor. dicen que aquí en 10 de Octubre y Vía Blanca está lleno eso, vengan ya para la casa.»

«de inmediato, en las calles de La Habana, se produjeron los primeros enfrentamientos y detenciones de manifestantes. miles de personas han salido a la calle en Cuba al grito de «Patria o Vida», en plena crisis económica, agudizada por la pandemia.»

N

la madre de Danais no para de llamarlos… lo hace una y otra vez…

DC

y ya mi mamá ahí sí estaba atacada. y fue que regresamos.

N

pero cuando Danais y su hermano se despidieron de sus dos acompañantes e iban de regreso a casa, la violencia policial también llegó a sus cuerpos…

DC

un policía que tenía a una muchacha… contra el cristal de una tienda así, dominada. y yo me puse a decirle al policía que la soltara, que era una mujer, que no estaba haciendo nada, que la soltara. el policía suelta a la muchacha y se vira para mí, como que me va pa’ arriba y mi hermano se mete en el medio, y ahí forcejearon y entonces yo, por detrás del policía: «¡suelta a mi hermano!» y en ese forcejeo parece que me dio en la nariz…

 

cuando él se cansó, soltó a mi hermano y se viró a donde estaba yo y me metió una galleta contra el cristal de una tienda.

N

una galleta es una bofetada… el policía golpeó en la cara a Danais, que ya estaba herida, con sangre en el rostro.

DC

y ahí mi hermano, que lo que estaba viendo era mi cara con sangre, más le quería ir para arriba al policía. gracias a dios vinieron, vestidos de civil, de la policía y un militar, tenía ropa verde, le dijeron al policía que se fuera y aguantaron a mi hermano y le dijeron que dejara eso. y ya ahí el policía desapareció y esas personas nos dejaron irnos, no nos retuvieron, ni nada. y logramos salir de ahí.

N

tuvieron suerte, mucha suerte, de no ser detenidos, como sí sucedió con miles de cubanas y cubanos.

DC

y yo tenía miedo. ya en ese punto ya tenía muchísimo miedo, porque aquella imagen de ese policía yéndole arriba a mi hermano con una tonfa no se me olvida, ni se me borra de mi cabeza. eso no se me borra nunca.

 

luego de eso sí vimos muchísimas personas ya… llenos de sangre, las tiraban para arriba de los camiones…

N

Danais y su hermano regresaron caminando a casa desde el centro de La Habana. caminaron unos seis kilómetros. llegaron excitados. su madre estaba con una preocupación que le dura hasta hoy. los niños asustados, con miedo…

DC

todo ha ido tan a peor…

 

ya yo he perdido todas las ilusiones de que nada cambie a favor del pueblo.

 

no hay un futuro posible, de ninguna forma. al contrario, veo venir muchísimas cosas feas, tristes, horribles, aún peor de lo que ya son. más represión, más pobreza, más derrumbe. muy triste.

N

el domingo 11 de julio de 2021 ocurrió un suceso inédito en la historia de las últimas seis décadas en Cuba. decenas de miles de cubanos se manifestaron por mayores libertades y derechos. fueron detenidos más de 1 000 manifestantes, muchos de los cuales recibieron condenas de entre cuatro y treinta años de cárcel.

«ya se acabó, tú cinco nueve, yo, doble dos
ya se acabó, sesenta años trancado el dominó, mira
se acabó, tu cinco nueve, yo, doble dos
ya se acabó, sesenta años trancado el dominó»

DC

desde ese día mis hijos no… cuando  pasa algo, que ellos oyen que está pasando algo: «no salgas pa’ la calle… mamá, ¿tú vas a salir..?»

N

desde ese día… tan caluroso y tan largo que para muchos no termina…

DC

no me podía dormir, me sentía… era una mezcla de sentimientos, de esperanza por un lado, porque aún yo pensaba que podía pasar algo. por otro lado, mucha tristeza, yo cerraba los ojos y solo veía aquellas imágenes: sangre, gente pa’ dentro de los camiones chorreando sangre, a mi hermano, con aquel policía forcejeando, aguanta’o por el cuello, la tonfa en la cara…

CRÉDITOS
P

este testimonio fue grabado entre noviembre de 2021 y diciembre de 2023.

 

hizo la transcripción Inés Casal.

 

narración, Lola Amores

 

la edición y mezcla de sonido son de Irina Carballosa

 

la identidad visual de LMP y las ilustraciones son de Laura Llópiz

 

hemos escuchado fragmentos de

 

– Un sueño, Cuba grita libertad, de El Micha.
– Dura Magaly, de Yomil y El Dany; y
– Patria y Vida, interpretada por el barrio habanero de San Isidro

 

la música original para ‘La Mala Palabra’ fue compuesta por Carlos Sarmiento.

 

yo soy Enrique Guzmán Karell, y estuve a cargo del guion. también de la producción general, con la asistencia de Ileana Botalín, Laura Llópiz e Irina Carballosa.

 

estaremos de regreso en dos semanas, con vivencias de personas como tú.

 

gracias, muchas gracias por escuchar.